El calvo de los coches nos cuenta la historia del narcosubmarino apresado en la costa de Galicia. Miserables ataúdes de 20 m de eslora, motor de 2.000 CV, hasta 6 toneladas de cocaína y tres tripulantes agónicamente enclaustrados para cruzar penosamente el Atlántico y llevar la mercancía a Europa.
El culo del moro quedó obsoleto, que no se diga que no se invierte en I+D+i.