#RAEconsultas El uso de la letra «e» como supuesta marca de género es ajeno al sistema morfológico del español, además de ser innecesario, pues el masculino gramatical funciona como término inclusivo en referencia a colectivos mixtos, o en contextos genéricos o inespecíficos.
Hisashi Ouchi, de 35 años, Masato Shinohara, de 39 años, y Yutaka Yokokawa, de 54 años, trabajaban en la planta de procesamiento de combustible nuclear JCO ubicada dentro de la planta de energía nuclear Tōkai-Mura. Ouchi y Shinohara estaban mezclando un lote de combustible que contenía uranio en un tanque de acero inoxidable mientras Yokokawa estaba sentado en un escritorio a 4 metros (poco más de 13 pies) de distancia. De repente, hubo un destello azul cuando la mezcla experimentó una reacción nuclear que emitió radiación de neutrones y rayos gamma.
Naum Ciomu, un cirujano rumano, ha perdido su licencia médica y tendrá que pagar 154.000 euros después de protagonizar un incidente insólito y aterrador.
El médico sufrió un ataque de nervios en plena intervención quirúrgica, lo que le llevó a amputar el pene del paciente que operaba, según publica la página británica de Metro.
Ciomu llegó incluso a trocear el miembro sobre la mesa de operaciones ante los ojos atónitos del resto de personal que se encontraba en la sala.
El paciente afectado, Nelu Radonescu, de 36 años, se había sometido a esta intervención para corregir una malformación testicular.
Indemnizado por el centro y por el médico
Ahora Radonescu recibirá 30.900 euros para pagar una operación que reconstruirá sus genitales utilizando tejido del brazo, además de otros 154.000 por daños y perjuicios.
Los costes médicos serán afrontados por el seguro del hospital, ubicado en Bucarest, pero será el propio cirujano el que asuma el segundo pago, los 154.000 euros, algo que ha sido muy criticado por el resto de médicos.
Ciomu había cortado primero por error el conducto urinario del paciente, lo que le provocó el ataque de ira.
El material que registraba el robot aspirador, un modelo en desarrollo, se enviaba a una empresa de inteligencia artificial para el entrenamiento de la del dispositivo
la foto del degenerao
Un robot aspirador Roomba ha sido la causa de que las fotos de una mujer haciendo uso de su cuarto de baño terminaran siendo compartidas en Facebook y otras redes sociales. Las imágenes fueron tomadas por el dispositivo y más tarde publicadas por empleados de una empresa contratista encargada del análisis de las que registra el robot durante su funcionamiento.
Rombaaa, puterooooooo!
ya podían haber puesto más resolución
“Las fotos varían en tipo y sensibilidad. La imagen más íntima que vimos fue la serie de imágenes fijas de video que mostraban a la joven en el inodoro, con el rostro bloqueado en la imagen principal, pero no oscurecido en el desplazamiento granulado de tomas a continuación”, señala MIT Technology Review que ha tenido acceso a 15 de las imágenes, una fracción de los dos millones que iRobot ha compartido solo con Scale AI.